Las frutas y verduras son uno de los alimentos que más se desperdician. Hoy te enseñamos a conservar frutas y verduras de temporada para evitar el despilfarro y mantener una dieta saludable y equilibrada.

1/3 de los alimentos producidos en el mundo se pierde o se desperdicia. De estos alimentos, las frutas, las hortalizas y los tubérculos se sitúan en el 40-50% con las tasas más altas de desperdicio. Por eso, aprender a conservar frutas y verduras es un paso más para evitar el desperdicio alimentario.

 A continuación, te damos estos 6 métodos  para una mejor conservación:

 

  1. Usar recipientes de fibras naturales. Una de las ventajas, al contrario que con los de plástico, es que facilitan la transpiración de los alimentos, evitando que la humedad se acumule y los estropee.
  2. Separar los diferentes tipos de frutas y verduras. Para evitar que unos aceleren el proceso de descomposición de otros, lo mejor es separar ciertos tipos de alimentos y colocarlos por separado. Buenos ejemplos de ello son las manzanas, las cebollas, los tomates, la lechuga o las ciruelas.
  3. Usar bolsas transparentes perforadas. Se trata de recipientes especialmente diseñados para la conservación de los alimentos. Además, facilita la tarea de mantenerlos separados.
  4. Conservar al aire. Algunos alimentos como las patatas, las cebollas, el ajo y las batatas pueden permanecer en el exterior, siempre que se mantengan en un lugar fresco, seco y a oscuras.
  5. Antes de desperdiciar, congelar. La opción de congelar siempre será una buena idea para evitar que los alimentos se echen a perder. Lo único que hay que tener en cuenta es que las frutas o verduras que tengan un gran contenido en agua no serán las más recomendables. Ejemplos de esto son los tomates, la lechuga, los champiñones, las sandías o los melones.
  6. Revisiones periódicas. Uno de los principales problemas de conservar fruta y verdura es que no se revisa el estado de estos alimentos. Por lo que, cuando uno de ellos se echa a perder, afecta a los demás y acelera el proceso. Manteniendo el control diario se puede identificar rápidamente cuando esto sucede y separar el alimento afectado del resto.